domingo, agosto 26, 2007

La carga de los rohirrim (El retorno del rey)

Reconozco que tengo debilidad por las arengas y que no puedo evitar que se me saten los lagrimones y se me pongan los pelos como escarpias antes de las batallas, pero es absolutamente imposible no sentir un escalofrío al ver esta escena. He perdido la cuenta de las veces que la he visto, pero siempre tiene el mismo efecto en mi. La luz, la arenga de Theoden, el choque de su espada con las lanzas de sus hombres y ese violín...Sin duda una de las mejores escenas de la trilogía.


[...]Entonces, de improviso, Merry sintió por fin, inequívoco, el cambio: el cambio de viento. ¡Le
soplaba en la cara! Asomó una luz. Lejos, muy lejos en el sur, las nubes eran formas grises y remotas que
se amontonaban flotando a la deriva: más allá se abría la mañana.
Pero en ese mismo instante hubo un resplandor, como si un rayo hubiese salido de las entrañas
mismas de la tierra, bajo la ciudad. Durante un segundo vieron la forma incandescente, enceguecedora y
lejana en blanco y negro, y la torre más alta resplandeció como una aguja rutilante; y un momento
después, cuando volvió a cerrarse la oscuridad, un trueno ensordecedor y prolongado llegó desde los
campos.
Como al conjuro de aquel ruido atronador, la figura encorvada del rey se enderezó súbitamente.
Y otra vez se le vio en la montura alto y orgulloso; e irguiéndose sobre los estribos gritó, con una voz más
fuerte y clara que la que oyera jamás ningún mortal:
¡De pie, de pie, Jinetes de Théoden!
Un momento cruel se avecina: ¡fuego y matanza!
Trepidarán las lanzas, volarán en añicos los escudos,
¡un día de la espada, un día rojo, antes que llegue el alba!
¡Galopad ahora, galopad! ¡A Gondor!
Y al decir esto, tomó un gran cuerno de las manos de Guthlaf, el portaestandarte, y lo sopló con
tal fuerza que el cuerno se quebró. Y al instante se elevaron juntas las voces de todos los cuernos del
ejército, y el sonido de los cuernos de Rohan en esa hora fue como una tempestad sobre la llanura y como
un trueno en las montañas.
¡Galopad ahora, galopad! ¡A Gondor!
De pronto, a una orden del rey, Crinblanca se lanzó hacia adelante. Detrás de él el estandarte
flameaba al viento: un caballo blanco en un campo verde: pero Théoden ya se alejaba. En pos del rey
galopaban los jinetes de la escolta, pero ninguno lograba darle alcance. Con ellos galopaba Eomer, y la
crin blanca de la cimera del yelmo le flotaba al viento, y la vanguardia del primer éored rugía como un
oleaje embravecido al estrellarse contra las rocas de la orilla, pero nadie era tan rápido como el rey
Théoden. Galopaba con un furor demente, como si la fervorosa sangre guerrera de sus antepasados le
corriera por las venas en un fuego nuevo; y transportado por Crinblanca parecía un dios de la antigüedad,
el propio Oróme el Grande, se hubiera dicho, en la batalla de Valar, cuando el mundo era joven. El
escudo de oro resplandecía y centelleaba como una imagen del sol, y la hierba reverdecía alrededor de las
patas del caballo. Pues llegaba la mañana, la mañana y un viento del mar; y ya se disipaban las tinieblas;
y los hombres de Mordor gemían, y conocían el pánico, y huían y morían, y los cascos de la ira pasaban
sobre ellos. Y de pronto los ejércitos de Rohan rompieron a cantar, y cantaban mientras mataban, pues el
júbilo de la batalla estaba en todos ellos, y los sonidos de ese canto que era hermoso y terrible llegaron
aun a la ciudad.
[...]
La cabalgata de los Rohirrim. El retorno del Rey (J.R.R. Tolkien)

3 comentarios:

Cris dijo...

Pues sí, Lal, una de las mejores escenas de la trilogía. A mi me encanta, se me pone la piel de gallina al verla.

Anónimo dijo...

me encanta me encanta me encanta me encanta me encanta me encanta me encanta me encanta me encanta me encanta me encanta me encanta me encanta me encanta me encanta me encanta me encanta me encanta me encanta me encanta me encanta me encanta me encanta me encanta me encanta me encanta me encanta me encanta me encanta me encanta Gracias por recordarla!!!!

Alatesta ;)

Lal dijo...

Y a mi me encanta verte por aquí!!!!
Un besazo Ala, un besazo Cris!!