miércoles, octubre 04, 2006


-Shirak -susurró una voz y comenzó a resplandecer la brillante luz de una bola de
cristal, incrustada en la dorada garra de un dragón y labrada sobre un sencillo bastón de
madera. La luz iluminó la túnica roja de un mago.


Yo soy más sencilla que todo eso, no tengo un bastón con una garra de dragón, ni bolas de cristal que se iluminen a mi voluntad. No soy un mago.

Soy alguien que hubiera querido serlo.


Sin embargo, con una sola palabra seré capaz de iluminar lo que aún esta oscuro, incluso para mi, para que se haga visible.


Se enciende una luz....


Shirak!!

2 comentarios:

Eresus Online dijo...

Lo sencillo puede ser realmente impresionante, y tu lo eres. No necesitas un bastón, ni hacer magia para demostrarlo. Quien te conozca sabe que lo que vales, y yo te conozco.
Ánimo con el blog, no lo dejes.
Besote
;-)...eresus!!!

Carlos Zarzuela dijo...

Una sola palabra bastó para iluminarme.